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Si no le ha enseñado a su hijo desde que es pequeño a dormir en una cuna o cama separada de la suya, será FEO para usted. No desesperes, a todos los niños se les puede enseñar a calmarse y a dormirse solos.

 

Compartimos contigo algunas alternativas que te ayudarán durante este período de transición.

  

Método A– Usted permanece en la habitación de su hijo, pero no se acostará en su cama ni interactuará con él. Todas las noches te sentarás en una silla y la alejarás de la cama hasta salir de la habitación. En ese momento (un período de 4 a 7 noches), aceptará la idea de que usted está cerca mientras duerme, incluso si no puede verle. Si has conseguido este método y de repente tu hijo te exige volver a la habitación, tómalo suavemente de la mano y asegúrale que está bien volver a la cama y que estarás cerca por si necesita algo.   No te acuestes en la cama de tu hijo o sabotearás todas sus noches de insomnio.

 

Método B – Llevas a tu hijo a la cama y le prometes que volverás en cinco minutos para ver cómo está. ¡¡MANTEN LA PROMESA!! Esto lo harás según sea necesario durante la noche prolongando los minutos cada vez hasta que se duerma. Este método parece ser el favorito entre los padres.

 

Método C – Si falló en los Métodos A o B, entonces el método drástico es llevar a su hijo de regreso a la habitación y decirle que “Necesita quedarse en la cama para dormir”. Algunos niños se quedarán y obedecerán, otros seguirán saliendo de la habitación y algunos padres cerrarán la habitación para que sus hijos se queden en sus habitaciones.

 

En nuestra opinión, no es necesario cerrar la habitación de su hijo, dejarlo llorar hasta que se duerma o cualquier otro método que ponga histérico a su hijo.   Alentamos a los padres a probar los métodos A o B.

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Necesitas crear unNoche rutina que puede incluir lo siguiente:

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•  Tomar un refrigerio saludable (no en la habitación).

•  Charle un poco mientras acompaña a su hijo a la habitación (pregúntele sobre el día, dígale lo contento que está con su buen comportamiento en la escuela, en casa o en la guardería).

•  Tener un momento especial con mamá o papá que puede incluir: cantar una canción especial, decir una oración, darle las buenas noches a la mascota de la familia, escuchar una canción antes de acostarse).

•  Lea un libro junto con su hijo.